La llegada de un nuevo producto firmado por Wilson Audio siempre merece la máxima atención, porque la firma estadounidense jamás lanza al mercado un producto que no tenga nada que aportar.
En esta ocasión estamos ante la revisión de la caja acústica de columna más compacta de la marca, el modelo Sabrina, que ha sido enriquecida con mejoras sustanciales en varios de sus elementos clave, en especial el recinto externo, construido ahora en su totalidad en el exclusivo material “X” de Wilson Audio.
Bautizada como SabrinaX, la nueva propuesta de Wilson Audio bebe en cierto modo del actual buque insignia de la compañía, la espectacular Chronosonic XVX, considerada por sus creadores como la realización “de serie” más compleja y ambiciosa de toda la historia de la firma estadounidense. ¿El resultado? Una caja acústica con una dinámica y una riqueza armónica genuinamente “Wilson Audio” que cautiva.
Buscando el sonido absoluto: la necesidad de tener una plataforma neutra
“La estructura física de una caja acústica debe tener como objetivo último que los altavoces montados en la misma puedan expresarse al cien por cien de su potencial.” ¿Qué significa esto? Pues que el sonido de la caja en cuestión debe ser única y exclusivamente el que emiten los altavoces de la misma y, por tanto, sin ningún tipo de interferencias, caso de ondas estacionarias –resonancias- internas del recinto y vibraciones de las paredes del mismo, todas ellas susceptibles de añadir su propia “firma” al sonido, desvirtuándolo en mayor o menor medida. Más aún, en el caso de las vibraciones de las paredes aparece un elemento perjudicial extra, por cuanto una parte de la energía procedente del amplificador se utiliza para excitar el panel donde están montados los altavoces. Todo esto nos lleva a la necesidad de conseguir que el recinto de una caja acústica se comporte como una plataforma absolutamente neutra, lo que implica rigidez extrema por un lado y neutralidad tonal también extrema por otro.
Sucede un poco como en un giradiscos, donde el control de las resonancias es fundamental para que el conjunto brazo-cápsula pueda concentrarse en su misión: leer el contenido de los surcos del disco de vinilo. Llegados a este punto, todo dependerá de las estrategias adoptadas por cada fabricante, tanto en giradiscos como en el caso que nos ocupa. De dichas estrategias hay algunas ya clásicas, como por ejemplo evitar la presencia de paredes paralelas en lo que a geometría del recinto se refiere, utilizar refuerzos internos para minimizar –idealmente reducir a cero- posibles vibraciones y, por supuesto, emplear materiales lo más acústicamente neutros posible. De la correcta combinación de todos estos factores dependerá que nuestra caja acústica rinda o no al cien por cien de sus posibilidades.
SabrinaX: ADN de la Chronosonic XVX para llevar la Sabrina a un nuevo nivel
Casi seis años han transcurrido desde que la Wilson Audio Sabrina vio la luz, un tiempo durante el cual la firma dirigida por Daryl Wilson, hijo del desaparecido David Wilson y fundador de la compañía, ha realizado avances sustanciales en tecnología, componentes y materiales con motivo de la puesta a punto de cajas acústicas tan relevantes como la Sasha DAW, la WAMM Master Chronosonic y la Chronosonic XVX. Dentro de la particular operativa de Wilson Audio, parecía lógico dar un paso habitual en la marca: poner al día alguno de sus productos, habiéndose elegido para la ocasión la caja acústica de suelo más compacta de la firma estadounidense y siendo el resultado la SabrinaX.
Es precisamente la “X” que acompaña al nombre de esta elegante columna el principal elemento que la diferencia de su predecesora, por cuanto hace referencia al material en el que ha sido construida la totalidad de su recinto externo: el exclusivo compuesto “X” de Wilson Audio (en la Sabrina original sólo en el panel frontal y la base que soporta el conjunto). Como consecuencia de ello, el recinto de la SabrinaX se acerca mucho más al ideal de recinto cuasi-silencioso que Wilson Audio ha perseguido durante décadas, logrando de este modo que la música emerja de un fondo aún más oscuro con unos transitorios de graves y una claridad global sustancialmente mejorados. Por otro lado, un nuevo sistema de refuerzos internos permite reducir todavía más las resonancias originadas en el propio recinto, en cuyo diseño se han utilizado las técnicas de análisis de vibraciones por láser más avanzadas del momento con el objetivo de optimizar su geometría.
Puerto bass-reflex superior de nueva generación y tweeter de referencia absoluta
En la SabrinaX encontramos otra incorporación altamente significativa: un puerto bass-reflex de baja turbulencia mecanizado directamente en el subrecinto de medios/agudos muy similar al empleado en el módulo de medios de la Chronosonic XVX, siendo el resultado una clara mejora de la musicalidad y de la presentación sonora global de la zona media del espectro. En lo que concierne al subrecinto de graves, se utiliza uno de los tradicionales puertos de alta precisión fabricados en aluminio –mecanizado a partir de un bloque macizo de aluminio 606-T6- de Wilson Audio. En lo que concierne a la configuración electroacústica, la SabrinaX es un sistema de tres vías con otros tantos altavoces pertenecientes a la élite de la marca. El primero de dichos altavoces es el sofisticado tweeter Convergent Synergy MK5, desarrollado por Daryl Wilson y su equipo inicialmente para la WAMM Master Chronosonic e incorporada posteriormente en la Chronosonic XVX.
Considerado el mejor transductor de su clase jamás desarrollado por la firma estadounidense, el MK5 –cuyo diafragma está fabricado en tela de seda tratada- combina distorsión extremadamente baja, micro y macro-contrastes dinámicos exquisitos y una resolución sin precedentes. De reproducir la crítica gama media se encarga un transductor con cono de pasta de papel tratada de 146 mm de diámetro, mientras que la zona baja del espectro es confiada a un woofer con cono de pasta de papel de 203 mm idéntico a los utilizados en el módulo de graves de la Sasha DAW. De gestionar este conjunto de altavoces se encarga un filtro divisor de frecuencias de alta precisión equipado con condensadores AudioCapX, desarrollados específicamente por Wilson Audio –y construidos en su propia factoría- para la SabrinaX a partir de los AudioCapX-WA empleados en la Chronosonic XVX. La tecnología utilizada en estos condensadores reduce significativamente el ruido de fondo, permitiendo al oyente percibir un nivel de detalle y una resolución superior.
Una expresividad armónica genuinamente Wilson Audio
Probamos la SabrinaX en compañía de un fabuloso integrado 12000 de McIntosh y un giradiscos Pro-Ject Xtension 10 Evolution equipado con una cápsula de bobina móvil Ortofon Cadenza Blue, todo ello conectado con Transparent Super de 6ª Generación.
Llama la atención el extremadamente preciso equilibrado que permiten los pies terminados en punta de la SabrinaX (que no en vano son los mismos que los de la Chronosonic XVX), por cuanto aportan su particular grano de arena a esa neutralidad estructural de la que hablábamos en líneas anteriores.
De hecho, el clásico golpe con los nudillos de los dedos de la mano en cualquier superficie del recinto es inapelable al respecto: el golpe no sólo suena “seco”, sino que es extingue de inmediato. Una percepción que se transmite fielmente a un sonido que combina magistralmente resolución, dinámica y equilibrio tonal sea cual sea el género musical y la fuente utilizada. Impresiona la zona baja del espectro, incisiva y voluptuosa a partes iguales, hasta el punto de ser fácilmente asimilable al de una caja acústica con un recinto mucho mayor. Por otro, la superior sensación de inmediatez aportada por el incremento de la velocidad de respuesta –sobre todo en graves- se plasma en una escena sonora más natural y convincente con todo tipo de grabaciones. En definitiva, lo que nos brinda la SabrinaX es sonido Wilson Audio de pura cepa.