Sonus Faber Sonetto VIII a prueba
Fecha 27 Mayo 2019 Autor ada Tags Sonus Faber

Situada en la cúspide de la novísima gama Sonetto de Sonus Faber, la Sonetto VIII es una bella, sofisticada y versátil columna que pone las esencias de la reputada firma italiana al alcance del melómano exigente por un precio muy interesante, gracias a una política de “vasos comunicantes” tan inteligente como efectiva. Dicho con otras palabras, la Sonetto se aprovecha de muchas de las sustanciales innovaciones conceptuales y tecnológicas puestas a punto por la marca de Arcugnano en sus familias de cajas acústicas más emblemáticas, con el fin de exhibir una relación calidad/precio difícil de batir en el competitivo sector de las caja acústicas High End. Y todo ello con el valor añadido de un diseño y una fabricación realizados íntegramente en el cuartel general de Sonus Faber.

 

nlazando tradición e innovación a la manera italiana

Encarada con fuerza hacia su cuarta década de existencia, Sonus Faber es sin lugar a dudas una marca italiana especializada en audio “diferente”.  El motivo de tal distinción es bien simple: es la empresa de su sector que mejor ha sabido “vender” la tradición de excelencia en creación artística consustancial al país transalpino. Una filosofía que corre pareja a una pasión igual de intensa en el campo de la ingeniería, lo que ha convertido a las realizaciones de la marca en poco menos que únicas dentro de su categoría, como consecuencia de la singular fusión de diseño industrial, tecnología y sonido que exhiben. Tal y como afirma Livio Cucuzza, máximo responsable de diseño de la firma, “Sonus Faber nació de las ideas de un hombre que amaba la música y su correcta reproducción, pero también de una persona con una sensibilidad especial sobre los productos de madera fabricados a mano y que sentía una verdadera reverencia por la belleza. Sonus Faber no es sólo un fabricante de cajas acústicas; es, antes que nada y por encima de todo, una manera única de enfocar el diseño de un producto musical.” Y la realidad es que el objetivo de la compañía ha sido siempre partir de una cierta tradición atemporal de cultura italiana y combinarla con lo último en innovación tecnológica para crear productos capaces de transmitir la emoción de la música.

 

Sonetto: homenajeando a la más antigua de las estructuras poéticas italianas

Si echamos un vistazo a las diferentes gamas de cajas acústicas comercializadas por Sonus Faber en su dilatada y prolífica trayectoria empresarial, descubriremos fácilmente un elemento común a todos ellas: su inspiración en la cultura italiana más exquisita. La última expresión de esta manera de pensar se llama Sonetto, una familia de cajas acústicas que rinde homenaje a un elemento clave de la literatura del país transalpino, el soneto, cuyo significado es “sonido, melodía” y que fue tradicionalmente utilizado para acompañar interpretaciones musicales. Una familia que además se aprovecha de los enormes progresos realizados por Sonus Faber en ingeniería y capacidad productiva para ofrecer una propuesta en la que la excelencia en calidad sonora viene cogida de la mano con un precio de clara vocación democrática y, como señalábamos al principio, esa “guinda” que es el “Made in Italy” al 100%. Una filosofía que se ejemplifica en su máxima expresión en el modelo de más alto nivel de la gama, la columna Sonetto VIII, protagonista del presente Blog.

Un brillante concentrado de los elementos icónicos de Sonus Faber

La Sonetto VIII es una estilizada columna en la que destaca de inmediato el que sin duda es el sello de identidad estético más significativo de Sonus Faber: la forma de laúd, que asegura la total ausencia de paredes paralelas en el interior del recinto y permite controlar de una manera muy efectiva las resonancias presentes en el mismo. Una geometría que viene acompañada de una construcción irreprochable, con mecanizados de alta precisión, basada en el uso de materiales naturales, que es rematada por un elegante revestimiento de cuero –“importado” de la gama Olympica- en el panel superior. Otro elemento muy significativo de la Sonetto VIII es que el panel frontal o bafle es una parte integral del recinto, creándose de este modo una estructura sin costuras, continua, con los paneles laterales curvados. Menos espectacular, pero que también aporta su granito de arena tanto en belleza estética como en calidad sonora, es el uso de embellecedores de aluminio alrededor de cada uno de los altavoces empleados. La parte “mecánica” de la Sonus Faber se completa con una estilizada estructura de brazos metálicos que sujetan el recinto y en cuyos extremos encontramos –al igual que en los modelos de más alto nivel de la marca italiana- conos de aluminio de muy alta calidad ajustables. En definitiva, forma al servicio de la función en estado puro.

 

Configuración acústica de vanguardia con componentes hechos a medida

Tanto en su concepción como en su ejecución, la parte electroacústica de la Sonetto indica claramente su ADN Sonus Faber al máximo nivel. De entrada, el uso de un sistema de 3 vías 5 altavoces, ya casi clásico en la marca italiana para lograr la mezcla perfecta de prestaciones, estética y polivalencia. En segundo lugar, la carga réflex de los altavoces de graves mediante un puerto situado en la zona inferior del recinto, solución que proporciona al usuario una flexibilidad máxima en términos de instalación. Más interesante es, como consecuencia de su empleo pionero en una caja acústica de este nivel de precio, la presencia de la denominada “Voice of Sonus Faber”. En concreto, se trata de la combinación de un tweeter de cúpula de seda de 29 mm de diámetro con tecnología DAD (“Damped Apex Dome”) y un altavoz de medios de 150 con cono compuesto de una fibra natural especial y una mezcla de pulpa papel sin prensar secada al aire. Por su parte, los tres woofers utilizan diafragmas de aluminio de 180 mm de diámetro para maximizar la linealidad y la dinámica por un lado, extendiendo a la vez la curva de respuesta en frecuencia hasta 35 Hz. De la gestión de todos estos transductores hechos a medida se encarga otro “clásico” de Sonus Faber: un filtro divisor de frecuencias de diseño antirresonante con respuesta en amplitud y fase optimizada, topología circuital Paracross y compensación de impedancias en las frecuencias bajas (para facilitar el trabajo el amplificador de ataque).

Sonido genuinamente Sonus Faber en naturalidad y polivalencia

Múltiples son las opciones en materia de amplificación que permite una caja acústica como la Sonetto VIII gracias a su sensibilidad de 90 dB y sus 4 ohmios de impedancia nominal. Dicho esto, probamos la primera pareja llegada a nuestro cuartel general en compañía de un amplificador integrado estereofónico con “streamer” incorporado, el Primare I35 Prisma, y el reproductor de discos compactos Primare CD35, todo ello interconectado con Transparent Super de 5ª Generación.
Pese a no haber tenido rodaje, las Sonetto VIII exhiben desde el primer momento una tímbrica precisa, rigurosa y relajada a partes iguales, que gracias a la combinación de la fuerza, el sentido del equilibrio y la capacidad de análisis de la electrónica de amplificación y las fuentes digitales empleadas y, muy importante, la neutralidad virtualmente absoluta del recinto de las Sonus Faber, la música es proyectada hacia el usuario con una rotundidad que alcanza cotas de credibilidad grandiosas por poco que la toma de sonido sea mínimamente acertada. Y es que la dinámica, libre de las ataduras propias de un recinto no absolutamente rígido e inerte, se expresa a gusto, con el añadido de un control excepcional por obra y gracia de unos transductores muy depurados, organizados en una configuración fruto de años de experiencia. Unas cualidades que invitan a pensar que, tal y como afirman sus creadores, estamos ante una caja acústica que también impresionará en la reproducción de las bandas sonoras cinematográficas más exigentes en términos de precisión tonal.