Nuevas Wilson Audio Yvette
Fecha 11 Octubre 2016 Autor Juan Tags Wilson Audio

Superando con nota a la legendaria Sophia

Sustituta de la tan longeva como celebrada Sophia, de la que se llegaron a comercializar 3 “evoluciones”, la Yvette es una nueva demostración del excepcional momento creativo de Wilson Audio, que en unos pocos años ha dado un vuelco espectacular a una gama de productos ya de por sí extraordinaria.

Nuevos materiales para el recinto, nuevas topologías en el filtro divisor de frecuencias y los altavoces y el cuidado posicionamiento de estos últimos en un panel frontal que recuerda poderosamente al de modelos como la Sasha Serie 2 o incluso la Alexia, se han encargado de obrar el milagro: superar con nitidez a todos y cada uno de los parámetros clave de la Sophia para ofrecer una reproducción del sonido pletórica de transparencia y vitalidad.

 

El fruto más reciente de una potente renovación generacional

El término “generacional” lo utilizamos en este caso por partida doble, casi como un juego de palabras, porque Wilson Audio ha alcanzado en los últimos años unas cotas de excelencia más altas que nunca, a la vez que la compañía de Provo (Utah, EE.UU.) ha conseguido asegurar su futuro como empresa de la mano de Daryl Wilson, hijo del fundador y fuertemente implicado en el desarrollo de algunos de los proyectos más recientes y espectaculares de la marca.

Por lo demás, no se puede negar que la evolución de la compañía fundada en 1974 por David Wilson encaja con la mejor tradición del High End: propiedad familiar, empleados fuertemente comprometidos con el proyecto, apuesta por la calidad extrema a todos los niveles y, por encima de todo, búsqueda del máximo realismo sonoro en cada modelo, amén de una coherencia extraordinaria en todo su catálogo. Es precisamente esta coherencia lo que ha hecho que, periódicamente, hayan salido a la luz versiones mejoradas de modelos ya existentes –WATT/Puppy, MAXX, Sophia, Alexandria o Sasha W/P, por ejemplo- y sólo cuando se ha considerado que la particular “vía de la excelencia” de los mismos ha quedado agotada se crea un producto completamente nuevo, es decir, partiendo de cero. Es el caso de la Yvette, quinta caja acústica completamente nueva de Wilson Audio que ve la luz en muchos años y que no sólo parte de esta gloriosa tradición, sino que su tecnología de base se aprovecha de las innovaciones nacidas en la que con toda seguridad es la época más prolífica que la firma estadounidense ha conocido hasta la fecha.

De ahí que en el código genético de esta bella y compacta columna se encuentren elementos conceptuales e incluso componentes idénticos a los empleados en modelos como la Sasha Serie 2, la Alexia e incluso la Alexx. Hay además otro elemento fundamental a considerar: la Yvette ha sido, al igual que la ultramoderna Alexx, desarrollada en paralelo con la nueva generación del supersistema WAMM, versión actualizada del que vio la luz hace más de 30 años, formado por cuatro bloques y destinado a ser la obra definitiva de David Wilson. Todo ello convierte a la Yvette en la caja acústica de un solo recinto más avanzada de la historia de Wilson Audio. Dotada de una innovadora geometría que, como señalábamos anteriormente, recuerda a la de varias de sus hermanas mayores, la Yvette se beneficia de las investigaciones más recientes de Wilson Audio en el campo de los materiales avanzados, con el fin de optimizar las prestaciones en el dominio de tiempo –la crítica respuesta en fase- y minimizar las resonancias de muy baja frecuencia.

Para lograrlo, utiliza un recinto construido fundamentalmente con paneles de tercera generación del exclusivo material “X” de la firma estadounidense –recordemos al respecto las míticas X-1 Grand SLAMM- en combinación con el material “S”, también exclusivo de Wilson Audio y caracterizado por sus aportaciones a la reproducción de las frecuencias medias. En concreto, el material “S” se utiliza en el panel que soporta el altavoz de graves para optimizar la integración de su respuesta en fase con la de los transductores de agudos y graves. A ello hay que añadir un innovador puerto para el recinto que alberga el altavoz de medios, cuyo diseño es muy similar al empleado en modelos como la Alexandria XLF, la Alexx, la Alexia y la Sasha Serie 2. Por su parte, el panel que soporta el tweeter está construido en el antes mencionado material “X” para optimizar la respuesta en fase y la dispersión.

De la Yvette también hay que destacar el cuidado extremo puesto en el diseño de elementos aparentemente “secundarios” como las rejillas protectoras, así como la presencia, en la zona posterior del recinto de graves, de una cámara aislada que permite al usuario acceder al exclusivo sistema de ajuste fino mediante resistencias de Wilson Audio y que sin duda constituye una de las claves de su sonido. También la selección de altavoces de la Yvette ha recibido las máximas atenciones, con la tercera evolución del “Convergent Synergy Tweeter” de la firma estadounidense por un lado y, por otro, un altavoz de medios idéntico al empleado en la Alexandria XLF, más un woofer originalmente desarrollado para la Alexia cuya estructura es muy similar a la del empleado en la nueva Alexx y el futuro WAMM “G2”. El resultado es una caja acústica que, pese a carecer de los ajustes en el dominio del tiempo que caracterizan a los diseños modulares de Wilson Audio, exhibe una respuesta en fase única, que se traduce en una musicalidad sin precedentes en un producto de su clase equipado con un único recinto. Una musicalidad avalada por parámetros técnicos tan interesantes como una respuesta en frecuencia de 20-25.000 Hz (+/-3 dB) y una impedancia nominal de 4 ohmios con un valor mínimo de 2’94 ohmios, que garantizan por un lado una curva de respuesta subjetiva prácticamente perfecta y, por otro, una elevada flexibilidad a la hora de escoger la electrónica de ataque.

 

Un sonido ágil, preciso y perfectamente cohesionado

Son varias las opciones en materia de amplificación que barajamos para escuchar las Yvette, recién llegadas a nuestro cuartel general. Al final, intentando conectar emocionalmente con las pruebas de escucha que realizamos con las diferentes versiones del modelo al que sustituyen, optamos por elegir el nuevo número uno de la renovada gama de amplificadores “inteligentes” de la parisina Devialet: el deslumbrante sistema doble monofónico 1000 Pro. La guinda del conjunto la pone un giradiscos Pro-Ject Signature 12 equipado con una cápsula fonocaptora de bobina móvil Ortofon MC Windfeld, que nos permite conocer -¡y disfrutar!- de primera mano de las increíbles opciones de ajuste permitidas por la sección de fono del 1000 Pro. Para la unión Devialet-Yvette utilizamos un Transparent Ultra, mientras que para la conexión del giradiscos elegimos el modelo Ultra Phono Interconnect de la misma marca.
Con todo a punto y el 1000 Pro debidamente “caldeado”, el primer aspecto que nos llama la atención de las Yvette es una respuesta en graves prodigiosa en su evolución que convence desde el primer momento por su perfecta definición –no hay ningún acorde “hinchado” que arruine la presentación del mensaje reproducido- y un control absolutamente sensacional por cortesía tanto del diseño electroacústico de las Wilson,  como del alucinante factor de amortiguamiento -¡8.000!- del sistema Devialet. Pero si los graves del conjunto sorprenden por su belleza física, lo que de verdad hace que las Yvette enamoren es que en ningún momento se dejan llevar por la frialdad, ni siquiera con algunos instrumentos y voces que cuando son transferidos al campo digital siempre acaban perdiendo parte –aunque sea una parte mínima- de su calidez. Las flamantes Wilson responden en todo momento sin que la curva de respuesta en frecuencia subjetiva se desestructure ni la dinámica flojee, lo que se traduce en un confort que hace que la escucha pueda prorrogarse en el tiempo sin que se produzca la más mínima fatiga. Excelente, casi asombroso, es asimismo el posicionamiento espacial de los instrumentos, debido sin duda a un diseño que, pese a carecer de los elementos de ajuste  mecánicos para “enfocar” el sonido, habituales de los modelos superiores de Wilson Audio, se aprovecha de los conocimientos vertidos en estos últimos para crear escenas sonoras complejas muy bien dimensionadas en un amplio repertorio de espacios. La verdad es que la escena sonora creada está muy lograda –las diferencias las marcan las cualidades/limitaciones cada grabación- incluso en profundidad, con un sonido siempre abierto y bien aireado que invita a escuchar desde una voz solista acompañada de un único instrumento hasta una orquesta sinfónica. Y todo ello, no lo olvidemos, a partir de una columna de poco más de 1 metro de alto. A la vista de los resultados de nuestras pruebas, no nos cabe ninguna duda de que, con la Yvette, Wilson Audio ha conseguido superar a la Sophia, situando a la primera en una galaxia cualitativa todavía superior, como consecuencia de la aplicación de tecnologías desarrolladas para sus modelos más avanzados y, por supuesto, de su obsesión por lograr el máximo realismo sonoro.