Audio Research GSPre + GS150
Fecha 14 Diciembre 2014 Autor Juan Tags Audio Research

Seducción absoluta en electrónicas a válvulas

Pocos amantes del sonido absoluto negarán la posición privilegiada de Audio Research entre las auténticas leyendas de la reproducción musical con mayúsculas. Privilegiada por varios motivos: en primer lugar porque, contrariamente a otros grandes nombres de lo que se conoce como audio High End, la firma fundada a principios de la década de los años setenta por el mítico William Z. Johnson mantiene el envidiado status de leyenda en vida. Sí, Audio Research lleva ya muchos años creando nuevos y sensacionales productos por el placer de superarse a sí misma. Dicho de otro modo: la compañía de Minnesota ya no tiene que demostrar nada.

Pero hay más: quizá muchos aficionados no lo sepan, pero lo cierto es que Audio Research fue una de las poquísimas compañías de su sector que en pleno ascenso del “solid state” –la electrónica de “estado sólido”, basada en cristales de silicio y no en tubos de vacío- apostaron de manera decidida por seguir empleando válvulas de vacío en sus preamplificadores y etapas de potencia. Es posible que la lejanía en el tiempo no permita valorar en su justa dimensión la decisión tomada en su momento por William Z. Johnson y su equipo, pero para entenderla basta saber que en el momento de la fundación de Audio Research se estaba produciendo una sustitución en masa –salvo en algunas aplicaciones muy concretas- de las válvulas de vacío por los transistores (en aquel entonces sólo bipolares… con el tiempo aparecerían variantes más “musicales” de los mismos) y el “viejo orden” de la electrónica se estaba hundiendo a marchas forzadas. Tanto, que durante por lo menos un buen par de décadas, léase desde principios de los setenta hasta principios de los noventa, el mercado de las válvulas de vacío se colapsó hasta el punto de que sólo era posible elegir entre modelos procedentes de los stocks de la OTAN (hablamos por tanto de válvulas de calidad militar y muy fiables pero también caras) o, si se buscaba algo más asequible para su empleo en productos para uso doméstico, diseños “Made in China” de la China de hace 20 años y, por tanto, de fiabilidad más bien “asimétrica”. Luego vino la desintegración de la Unión Soviética, lo que permitió acceder a válvulas de calidad militar pero en este caso mucho más económicas, hecho que permitió a los fabricantes de electrónicas de audio a válvulas disponer de nuevo de dispositivos de gran nivel.

 

Un toque de diseño italiano para la espartana Audio Research

¿A qué viene tanta explicación? Pues sencillamente a cuenta de que incluso con unas condiciones tan adversas el talento de los ingenieros de Audio Research hizo posible crear unos productos fabulosamente musicales gracias a la originalidad de las topologías circuitales por ellos desarrollados. De este modo, durante más de 40 años la firma estadounidense ha estado produciendo sin descanso electrónicas a cada cual más musical, en el ámbito de la preamplificación y la amplificación (tanto en su formato integrado como en etapas de potencia).

Todo ello a pesar de las evidentes limitaciones existentes en los dispositivos clave a la hora de materializar su filosofía, aunque respetando escrupulosamente aspectos igualmente fundamentales como la selección de los componentes asociados a los citados dispositivos (transformadores, resistencias, condensadores, potenciómetros, pistas de circuito impreso) y la calidad de fabricación. Una operativa que es coronada por la ambición por poner a punto productos cada vez más buenos en términos de prestaciones. Sólo una característica “histórica” de las electrónicas de AudioResearch se ha mantenido intacta con el paso del tiempo: su inconfundible austeridad formal, casi espartana, sólo parcialmente “rota” por los acabados de los modelos más elitistas y la incorporación de automatismos encaminados a agilizar la gestión. Pero la incorporación  de la firma estadounidense en la joven empresa italiana Fine Sounds Group ha acabado afectando, por el momento para bien, hasta el punto de que en el pasado “show” High End de Múnich nos quedamos literalmente anonadados con dos productos de ultimísima generación englobados en una nueva gama de prestigio de la marca: la Serie “G”, de Galileo.Un homenaje a uno de los grandes genios del Renacimiento italiano que vino a suponer toda una declaración de intenciones, porque hay que reconocer que en Audio Research se las han ingeniado para poner a punto dos productos con un “look” vintage absolutamente deslumbrante en el que a la vez se consigue preservar el concepto estético de las realizaciones de la marca… todo ello en el contexto de una fabricación rigurosamente manual con unos acabados irreprochables. Dicho de otro modo: los “G” son totalmente rompedores sin romper con una tradición que cuenta con una legión de admiradores.

En suma, un ejercicio de estilo casi “florentino” cuyo valor es realzado por la inclusión de novedades tecnológicas muy significativas. Hace poco más de un mes que recibimos las primeras unidades de estos verdaderamente despampanantes Audio Research y la verdad es que los “G” impactan porque combinan elementos icónicos de la firma estadounidense, aunque con unas líneas más suaves y contemporáneas, con ideas muy frescas relacionadas con el uso de válvulas de vacío en la reproducción de la música grabada. De ahí que en Múnich los nuevos “G” se mostraran codo con codo con modelos de la marca tan legendarios como el preamplificador SP-1 y la etapa de potencia D-150 para que los presentes pudieran percibir la poderosa presencia del ADN de los mismos en aquéllos, un poco a la manera de quien apuesta por el futuro haciendo un guiño a un pasado que en el caso de la firma estadounidense puede definirse como glorioso.

Así, en vez del acero inoxidable y el revestimiento de níquel empleado en los modelos clásicos se utiliza aluminio pulido tanto en el panel frontal como en el chasis, mientras que tanto la cubierta del transformador como la de las válvulas de la etapa de potencia estereofónica GS150, así como la cubierta del preamplificador GSPre, se presentan en una elegante terminación en negro. Dotado de un precioso panel frontal en el que destacan un visualizador de funciones fluorescente y cinco botones de control circulares de aluminio, el GSPre es un pleamplificador cien por cien a válvulas, balanceado y configurado en Clase A

en cuyo interior encontramos no sólo una sección de línea (con cuatro válvulas 6H30) y una de fono (con dos válvulas 6H30 que aseguran una ganancia de 58 dB con un bajo nivel de ruido), sino también un notable amplificador de auriculares compatible con un amplio abanico de impedancias. El aparato dispone de dos juegos de entradas balanceadas y tres de entradas no balanceadas (además de la de fono), así como de salidas balanceadas y no balanceadas, a la vez que el sistema de alimentación cuenta con fuentes electrónicamente reguladas tanto para baja como alta tensión. Por otro lado, y como electrónica de última generación que es, el GSPre puede formar parte de cualquier equipo personalizado, para lo que integra el ya clásico puerto RS232, tomas para señal de disparo de 12 V y una entrada de infrarrojos.

Y si el GSPre impresiona, la etapa de potencia GS150 resulta totalmente impactante como consecuencia de la belleza singular que le confieren los tres impactantes visualizadores analógicos del panel frontal, que muestran la tensión de alimentación (también sirve para ajustar la polarización –bias- de las válvulas) y la potencia de salida de cada canal. Además, la GS150 es el primer amplificador diseñado por Audio Research que incorpora la nueva válvula de potencia Tung-Sol KT150 (8 en total), lo que le permite combinar una salida de 155 vatios continuos por canal con una banda pasante extraordinariamente amplia (puntos de corte a -3 dB en 0’8 Hz y 220.000 Hz con señales de Línea), a la vez que ha sido diseñada para poder atacar sin limitaciones todo tipo de cajas acústicas (incluye, como es norma en Audio Research terminales de conexión separados para modelos de 4 y 8 ohmios se impedancia). En este sentido, está claro que los 1.040 julios de su reserva de energía constituyen toda una declaración de intenciones. Al igual que el GSPre, la GS150 utiliza una topología circuital completamente balanceada, hasta el punto de que sólo incorpora entradas con conectores XLR. En el panel posterior también encontramos un indicador de la vida de las válvulas, así como un puerto RS232, una toma para señal de disparo de 12 V y un conector para el cable de alimentación (de 20 A). La GS150 incluye también dos ventiladores ultrasilenciosos de velocidad ajustable con el fin de optimizar la evacuación de las calorías sobrantes, tarea que por otro lado es facilitada por una construcción enteramente metálica y por la disposición de las válvulas.

 

¿El sonido? Bienvenidos al Olimpo del audio

Probamos los dos Audio Research “G” en compañía de otra novedad de impacto, las cajas acústicas Sasha W/P Serie 2 de Wilson Audio, y fuentes en consonancia: el soberbio lector de CD con procesador digital Reference 9 de la propia Audio Research y un giradiscos Transrotor Tourbillon FMD con cápsula van den Hul The Colibri. El cableado, Transparent Reference XL, tanto en modulación como en conexión a cajas.

Para empezar, hay que reconocer que el sonido de los Audio Research Galileo es diferente de lo habitual en las electrónicas a válvulas “convencionales”, probablemente como consecuencia de las características de los dispositivos –sobre todo los de amplificación de potencia- empleados. Esto significa, por ejemplo, que los impactos dinámicos están muy controlados y que la zona alta del espectro posee una resolución perfectamente equiparable a las de las mejoras electrónicas de estado sólido. La plasmación de estas impresiones la encontramos en el magnífico CD “Montgolfières” (Harmonia Mundi) del cantautor italiano Gianmaria Testa, un trabajo cuya toma de sonido es un prodigio de naturalidad y perfeccionismo. Las modulaciones de la voz son profundas y están perfectamente definidas, a la vez que exhiben una “continuidad” que se traduce en esa “facilidad” en la restitución del sonido que caracteriza a los aparatos verdaderamente bien diseñados y que anima al usuario a pasarse horas y horas escuchando/reescuchando (en algunos casos incluso redescubriendo) sus grabaciones favoritas. Idéntica sensación encontramos en la escucha de discos de vinilo –utilizando en este caso los 3 LP’s editados hasta la fecha por la japonesa Esoteric- donde además descubrimos otro de los “efectos colaterales” de las depuradas topologías circuitales de Audio Research: el excepcionalmente bajo ruido de fondo, que junto con una ganancia generosa y unos tiempos de respuesta muy reducidos hace que la dinámica de las mejores tomas de sonido sea virtualmente “digital”.

En lo que respecta a la reproducción del grave y, sobre todo, el extremo grave, uno de los tradicionales puntos sensibles de las electrónicas a válvulas, se nota que los diseñadores de los “G” han afinado hasta el límite el diseño de la circuitería de salida de la GS150 por cuanto la pegada de los graves es inequívocamente “solid state”, pero sin el más mínimo punto de aspereza. Podríamos escribir un montón de líneas más sobre dos electrónicas que apabullan por su perfeccionismo y belleza físicos pero, por encima de todo, enamoran de manera irremisible por su sonido, un sonido que además posee algunos atributos relevantes –en especial la capacidad de entrega de corriente- que hasta ahora parecían vetados a los diseños basados en válvulas de vacío.