El Anthem AVM 70 es una de esas electrónicas que logran el equilibrio perfecto entre todos los mundos posibles, al haber sido creadas con mentalidad “pro” sin renunciar a un alma purista que contribuye a humanizar sustancialmente su sonido, al aportar a la reproducción de todo tipo de bandas sonoras esa musicalidad que hace que su escucha resulte mucho más confortable. Sin duda uno de los preamplificadores/procesadores de A/V más bonitos y completos actualmente disponibles en el mercado mundial, el AVM 70 destaca también por una versatilidad extrema, al combinar unas posibilidades muy generosas en ámbitos como el procesado de vídeo, la descodificación de audio y la conectividad con el sistema de corrección de salas ARC Genesis de la marca, reconocido unánimemente como uno de los más precisos y efectivos del momento.
Gracias a ello, la integración equipo-sala alcanza unas cotas impensables con los habitualmente menos sofisticados sistemas utilizados por otras marcas, con lo que ello implica en términos de optimización del sonido a la hora de reproducir los contenidos multicanal más complejos. Y por si todo esto no bastara, el AVM 70 es propuesto a un precio que facilita el acceso al High End A/V más exclusivo.
Anthem Room Correction (ARC): la receta de Anthem para marcar la diferencia
Desde hace ya muchos años se sabe que el elemento que más negativamente influye en la calidad sonora de un sistema de audio es la sala en la que está instalado, hasta el punto de que uno puede gastar una pequeña fortuna en el mismo y no evitar que su sonido siga siendo un desastre si la sala en cuestión presenta problemas acústicos serios. Quienes buscan soluciones que no comporten la colocación de paneles absorbentes en las paredes, trampas de graves en las esquinas o subwoofers en ubicaciones incómodas estarán encantados de saber que hay en el mercado sistemas de calibración de audio diseñados para eliminar –vía procesado acústico altamente sofisticado- los problemas más “peliagudos” de su sala. Pero, como siempre, hay sistemas y sistemas, estando la clave en saber cuáles de los mismos “hacen cosas” y cuáles las hacen bien.
El Anthem Room Correction o ARC pertenece sin ninguna duda a la segunda de las categorías mencionadas, incorporando ya en su versión original algoritmos y filtros sofisticados que combinaban software e interfaces gráficas de vanguardia con un micrófono calibrado de alta calidad para ofrecer unos niveles de precisión claramente superiores a los de sus competidores directos. Pero con su versión más reciente, de nombre Genesis, el ARC consigue ir todavía más allá, al haber refinado los elementos de software más relevantes del sistema original –ahora es compatible con Windows y Mac- y haber depurado su interfaz de usuario dotándola de un aspecto más moderno, un uso más intuitivo y la innovadora posibilidad de repetir las mediciones de una caja acústica individual y actualizar las curvas de respuesta previamente establecidas para la misma. En lo que a nuevas características se refiere, el ARC Genesis posee la capacidad de personalizar las curvas correspondientes a cada una de las cajas acústicas del equipo y establecer la frecuencia de corrección máxima para las mismas.
También los algoritmos de corrección han sido mejorados, disponiéndose asimismo de una nueva función de gestión de graves para integrar mejor el(los) subwoofer(s). Incluso hay una función de expansión –“pan”- y magnificación –“zoom”- para mirar los gráficos con mayor detalle, a la vez que es posible realizar múltiples mediciones para diferentes condiciones de la sala o guardar múltiples perfiles para sistemas diferentes. A modo de resumen, el objetivo del ARC Genesis es corregir picos y caídas en la curva de respuesta en frecuencia de las cajas acústicas entre 15 Hz y 20 kHz, preservando a la vez los atributos acústicos positivos de la sala, algo especialmente importante en las octavas más bajas del espectro, puesto que es en ellas donde la sala propiamente dicha tiene un impacto mayor.
AVM 70: un previo/procesador de A/V audiófilo con efectividad “pro”
Pese a su comedido (para tratarse de un producto inequívocamente High End) precio, el Anthem AVM 70 es uno de los centros de control para sistemas de Cine en Casa más avanzados, completos y musicales del momento, gracias a la excepcional combinación de capacidad de procesado y opciones de gestión y conectividad que ofrece, todo ello en el contexto de una concepción en la que la tecnología más avanzada y un innegable “punto audiófilo” vienen acompañados por un diseño distintivo y una calidad de fabricación del máximo nivel. En este sentido, hay que destacar que la capacidad de procesado de audio 15.2 canales del Anthem lo hace compatible con la codificación de audio basado en objetos más completa del momento, el DTS:X Pro, que requiere un mínimo de 13 canales.
A ello hay que añadir el soporte para Dolby Atmos, DTS:X y DTS Virtual:X, así como la homologación IMAX Enhanced y una conectividad HDMI 2.0b HDCP 2.2 con eARC que puede mejorarse a HDMI 2.1 vía actualización de hardware, con el fin de garantizar la compatibilidad con fuentes de vídeo 8K. De la sección de vídeo hay que señalar asimismo su compatibilidad con los sistemas Hybrid Log Gamma (HLG) y Dolby Vision, que garantizan el perfecto visionado de los contenidos HDR más exigentes. El AVM 70 también es compatible AirPlay 2, Google Chromecast y Bluetooth v4.2, facilitando de este modo el streaming de audio desde un amplio repertorio de dispositivos. Como no puede ser de otro modo en un componente audiovisual de última generación firmado por Anthem, el AVM 70 incorpora el exclusivo esquema de calibración ARC Genesis de la firma canadiense, que, como hemos comentado en el apartado anterior, permite al usuario una adaptación extremadamente precisa de su conjunto audiovisual a la sala en la que está instalado.
A todo ello hay que sumar un sofisticado sistema de configuración basado en web que incluso permite llevar a cabo actualizaciones sobre la marcha. Señalemos finalmente que el Anthem incluye salidas analógicas balanceadas con conectores XLR para sus 15.2 canales de audio, a la vez que es compatible con los sistemas de domótica más populares para facilitar su integración en instalaciones personalizadas. Y, un poco para recordar el origen de Anthem, no está de más saber que la sección de audio del AVM 70 está ejecutada con componentes seleccionados por sus virtudes sonoras.
Una experiencia sonora fabulosamente inmersiva
Probamos el AVM 70 en una configuración 7.2.4. Para ello, lo combinamos con una etapa de potencia de 5 canales MCA 525 Gen 2 de Anthem y dos etapas de potencia de 3 canales MCA 325 Gen 2 de la misma marca, siendo los siete canales de sonido envolvente tradicionales reproducidos por un conjunto de cajas acústicas de la gama Lumina de Sonus Faber (dos Lumina V para los canales principales, una Lumina C para el canal central y cuatro Lumina II para los efectos laterales y posteriores) y los cuatro canales “3D” reproducidos por dos Sonus Faber Palladio PC-562, todo ello completado con dos subwoofers activos Gravis I de la propia Sonus Faber. Como fuente de audio y vídeo utilizamos un reproductor de Blu-ray Disc 4K Reavon UBR-X110 y como videoproyector el imponente Sony VPL-VW590ES, confiando la totalidad de las conexiones a la alemana In-Akustik.
Aunque la clave de un sistema de audio/vídeo radica en, lógicamente, la calidad que ofrece durante la reproducción de sonido e imagen, en el caso que nos ocupa bien está destacar la potencia y elegancia del sistema de calibración ARC Genesis, un sistema que, pese a su complejidad, no obliga al usuario a ser poco menos que un doctor en acústica. De hecho, todo lo que hay que hacer es medir e introducir –en nuestro caso utilizamos un ordenador Mac- todas las distancias entre cajas acústicas y punto de escucha y a continuación seguir las instrucciones. El sistema realiza un mínimo de cinco mediciones con el fin de crear una respuesta promedio en la sala para cada caja acústica y cada subwoofer antes de aplicar curvas optimizadas para afinarla. Llegados a este punto, lo que hay que hacer es sencillamente disfrutar y lo cierto es que el AVM 70 permite disfrutar de una experiencia sonora fabulosamente inmersiva –con calidad de imagen a la altura, por supuesto- precisamente como consecuencia del excepcional control que ejerce sobre las reflexiones susceptibles de emborronar el mensaje sonoro. Un mensaje sonoro que por otro lado exhibe la misma naturalidad en música que en cine, como consecuencia de la concepción audiófila de base del Anthem. Estamos, sin la más mínima dura, ante una fantástica ejemplificación del concepto de relación calidad/precio aplicada a la reproducción de sonido e imagen al máximo nivel.