Considerada la mejor herramienta del momento para gestionar contenidos de audio digital (tanto si están almacenados en un ordenador o una unidad NAS, como si son reproducidos por streaming estándar o “Hi-Res”), Roon es una poderosa plataforma que dota de una dimensión integral sin precedentes a la escucha de música. Dos son los elementos que configura este ecosistema único: el Roon Core y las Roon Apps. Centro neurálgico del concepto Roon, el Roon Core es el auténtico cerebro del sistema, al encargarse de gestionar los archivos de música, los servicios de streaming y los componentes de audio de nuestro equipo, pudiendo ser realizadas sus funciones bien desde un ordenador, bien desde uno de los exclusivos Roon Nucleus, disponibles en versión Nucleus y Nucleus+. A ello hay que añadir una fácil conectividad a cualquier componente audiovisual compatible. De la inteligencia “práctica” del sistema, léase a nivel de usuario, se encargan las Roon apps, diseñadas para ser instaladas en tantos dispositivos fijos o móviles como queramos, y cuya misión es conectarse al Roon Core para permitirnos navegar, descubrir y reproducir música con un grado de personalización nunca visto.
Una personalización materializada en una serie de perfiles de usuario que permiten a cada uno disponer de sus propios contenidos favoritos, listas de reproducción, etiquetas, información histórica –sobre autores, álbumes, letras de canciones, fechas de conciertos, etc.- y recomendaciones. Asimismo, las Roon apps permiten, gracias a la potencia de su interfaz de usuario, disponer de una práctica funcionalidad multisala (con reproducción de música en habitaciones individuales, grupos de habitaciones o todas las habitaciones), a la vez que la posibilidad de unificar todas las bibliotecas de música que tengamos. Pero hay más, ya que la “inteligencia” de Roon permite incluso sugerir al usuario temas musicales disponibles en Internet tomando como punto de partida la música que le es conocida, organizándolos y dotándolos de características tan interesantes como la visualización de letras de canciones mientras son reproducidas. En paralelo a su extraordinaria versatilidad, el ecosistema Roon aporta una cualidad que lo ha convertido en el favorito de los puristas del audio de todo el mundo: una calidad sonora de nivel genuinamente audiófilo gracias a la potencia de un “Audio Engine” que combina reproducción “bit-perfect” de archivos PCM y DSD estéreo y multicanal, la compatibilidad con un amplio número de formatos (PCM hasta 32 bits/768 kHz, DSD hasta DSD512, MQA, WAV64, FLAC, ALAC, etc.) y Procesado Digital de Señal (DSP) de alta potencia. Gracias a la potencia del citado DSP, Roon pone en manos del usuario un conjunto de programas que le permiten personalizar su experiencia de escucha con funciones como el equilibrado del nivel de volumen, la ecualización, mezcla de canales (“crossfeed”), el remuestreo (“upsampling”) o la corrección de salas.
Para quienes no deseen tener que lidiar con varios componentes para disponer de todas las funcionalidades que acabamos de comentar en su particular universo sonoro, Roon ha puesto a punto el Nucleus y el Nucleus+, dos sofisticados aparatos que integran a la perfección hardware de altas prestaciones con un sistema operativo optimizado y software creado a medida con el fin de proporcionar una manera simple de disfrutar de la experiencia Roon más rica posible. Ambos componentes representan la culminación de un exhaustivo esfuerzo en diseño e ingeniería de producto, combinando la dilatada experiencia del equipo de Roon en la puesta a punto de hardware para servidores multimedia y en el desarrollo de software. La gama de productos Nucleus fue creada teniendo en mente varios objetivos, siendo el primero de ellos disponer de un Roon Core “llaves en mano” y por tanto sin recurrir a un ordenador PC/Mac o una unidad NAS. El segundo objetivo de los Nucleus es tener la potencia de cálculo suficiente para soportar los requerimientos de Roon tanto actuales como futuros. A ello hay que sumar una facilidad de uso que no requiera atención al cliente una vez instalado el sistema, así como la posibilidad de descargar actualizaciones de software y firmware “sobre la marcha” que puedan ser gestionadas por el usuario final. Asimismo, los Nucleus han sido diseñados para que su funcionamiento sea robusto y fiable, sin apenas mantenimiento, y para que resulten del agrado de los audiófilos, razón esta última por la que no contienen ventiladores ni partes móviles en su interior. Ya para finalizar, señalemos que Roon ha puesto a punto dos versiones del Nucleus cuya única diferencia radica en la potencia de cálculo pura y dura de que disponen. Así, el modelo Nucleus está destinado a la inmensa mayoría de usuarios, mientras que el Nucleus+ está pensado para quienes busquen satisfacer las más altas exigencias en materia de tamaño de su biblioteca de música, número de flujos de reproducción simultáneos y compatibilidad con los archivos DSD de frecuencia de muestreo más elevada.