El Servicio Técnico Oficial de Marantz ofrece las soluciones más rigurosas y solventes del momento para garantizar el perfecto mantenimiento de todos los productos comercializados por esta marca legendaria en sus más de 60 años de existencia. Esto significa que nuestro Servicio Técnico es el único que está en condiciones de reparar un amplísimo abanico de productos con la plena confianza y la total garantía de Marantz puesto que está perfectamente preparado para asegurar los elevados estándares de calidad que han convertido a esta marca japonesa nacida estadounidense en una de las más emblemáticas dentro del sector de la Alta Fidelidad y el Cine en Casa de altas prestaciones a nivel mundial.
Un Servicio Técnico Oficial para una compañía en cuya espectacular trayectoria empresarial figuran auténticos mitos del audio analógico, referencias absolutas del audio digital y excepcionales modelos para Cine en Casa. Productos que en muchos casos llevan funcionando con una fiabilidad sin mácula desde hace décadas gracias a una filosofía de diseño y fabricación en la que el uso de los componentes de más alta calidad (en muchos casos fabricados a medida) disponibles en el mercado mundial se complementa con topologías circuitales exclusivas y técnicas de ingeniería únicas cuyo conocimiento requiere la implicación de profesionales altamente cualificados en constante contacto con Marantz con el fin de asegurar la disponibilidad de soluciones optimizadas y componentes originales sea cual sea el modelo afectado.
Marantz fue fundada en 1953 por Saul Bernard Marantz, un profesional liberal neoyorquino amante del arte y apasionado de la música que, insatisfecho con la calidad sonora de los componentes de audio disponibles en su época, decidió construir sus propios diseños en su tiempo libre.
El éxito de su primer producto, construido artesanalmente para amigos y conocidos en 1952 y que Marantz bautizó con el nombre de Audio Consolette, fue el pistoletazo de salida para una historia de éxito sin precedentes. El Audio Consolette era un preamplificador que incorporaba un elevado número de curvas de ecualización de fono para el disco de vinilo, formato que vio la luz en 1948 y que en aquel entonces fue una auténtica revolución. A partir de ese momento, Marantz empezó a construir su propia leyenda creando algunos de los productos más icónicos a lo largo de la que se conoció como la Edad de Oro de la Alta Fidelidad.
Es el caso –corría el año 1958- del preamplificador Model 7, la etapa de potencia estereofónica Model 8 y la etapa de potencia monofónica Model 9, productos todos ellos que redefinieron de tal modo los estándares de calidad en la reproducción de la música en Ata Fidelidad que mantuvieron su condición de componentes de referencia durante 11 años consecutivos, con más de 130.000 unidades vendidas sólo del Model 7.
Unos años más tarde, en 1963, el Model 10B también redefinió la calidad de los sintonizadores de FM con su osciloscopio incorporado para verificar la potencia y el balance de la señal de radio. La década de los 70 vio a Marantz alcanzar nuevos logros con la comercialización de amplificadores y receptores muy potentes, destacando entre los mismos el Model 500, que entregaba nada menos que 250 vatios por canal sobre 8 ohmios.
Marantz no se ha contentado nunca con ofrecer productos simplemente correctos sino que su departamento de ingeniería siempre ha apostado por la innovación al más alto nivel, una innovación que en el mencionado Model 500 se tradujo en la inclusión de un esquema muy original para gestionar el calor materializado en un túnel de refrigeración con una tecnología de disipación térmica especial.
La pasión de Marantz por la tecnología llegó a una de sus más altas expresiones en otra gama de productos míticos: la Serie Esotec, que incluía la monumental -42 kg de peso y 400 vatios por canal sobre 8 ohmios- etapa de potencia estereofónica SM1000 y también una sensacional fuente de lectura analógica -el giradiscos TT1000, cuyo chasis es una estructura sándwich de vidrio y aluminio- que todavía es considerado un auténtico tesoro por los audiófilos más exigentes.
A principios de la década de los 80, el receptor de 2 canales Model 2600 también obtuvo una gran popularidad: se trataba de un nuevo gigante de Marantz, con 32 kilos de peso y 300 vatios por canal sobre 8 ohmios. El advenimiento de la era digital supuso un nuevo reto tecnológico que la firma fundada por Saul B. Marantz supo afrontar con la maestría de los elegidos, combinando su experiencia acumulada de 30 años en el diseño de componentes de audio analógicos con las nuevas tecnologías digitales, ámbito en el que la firma japonesa supo aportar elementos originales para marcar también diferencias en calidad sonora.
Modelos como el reproductor de discos compactos CD63 en sus diferentes ediciones pusieron al alcance de muchos melómanos y puristas del audio un tipo de calidad sonora desconocida en el joven universo del audio digital; y además por un precio extraordinariamente democrático sin precedentes en esa época. El mismo espíritu de pasión por la música y apuesta de por la popularización de la excelencia se aplicó más adelante durante la era del Cine en Casa auspiciada por el explosivo auge del DVD.
Marantz supo llevar al audio multicanal y el vídeo, en productos como receptores de A/V o lectores de DVD la misma magia que tanto prestigio proporcionó a sus componentes de audio estereofónicos.
El siguiente reto de legendaria marca fundada por Saul B. Marantz tuvo dos nombres: Cine en Casa de alta definición e Internet. Receptores de A/V extraordinariamente musicales, reproductores de Blu-ray Disc y multiformato, sistemas de audio inalámbricos -caso del fantástico Consolette- y los mejores “streamers” del mercado –con el formidable y fabulosamente construido NA-11S1 en cabeza- han permitido configurar la que en estos momentos es uno de los componentes de audio de alto nivel más seductoras y completas del mercado mundial.
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Esta complejidad, que se hace extensiva a los elementos tecnológicos más relevantes de cada producto (circuitos integrados, componentes discretos, módulos HDAM, mecánicas de transporte) hace que el mantenimiento de cualquier producto fabricado y construido por Marantz exija el perfecto conocimiento de sus entresijos. Es por ello que sólo el Servicio Técnico Oficial de Marantz está en condiciones de asegurar la disponibilidad de repuestos originales y unas instalaciones en consonancia para que la revisión y el ajuste de todo tipo de electrónicas de Alta Fidelidad y Cine en Casa se lleven a cabo con las debidas garantías.
Por otro lado, es fundamental insistir de nuevo en que los profesionales de nuestro Servicio Técnico han sido formados por Marantz para cualquier posible actualización o mejora de productos ya existentes o descatalogados se pueda ejecutar de tal modo que las prestaciones finales igualen o incluso superen a las que ofrecían en el momento de ser adquiridos ofreciendo de este modo el nivel de servicio que los usuarios esperan de una marca que ha creado escuela.
